Me siento extraña, es la primera
vez en mucho tiempo que intento buscar la paz dentro de mí y no en la que creo
que es la persona adecuada para mí. En realidad, estoy un poco mejor conmigo
misma. Haber tomado esta decisión y sentir que es la adecuada me hace sentir
bien.
Creo que... necesito recuperarme,
no en el sentido estrictamente sentimental por haber estado expuesta a
demasiados daños en mis anteriores relaciones tanto amorosas como de amistades, sino en sentido completo.
Necesito reencontrarme a mí misma
y saber qué ha pasado en mí en estos últimos años, por qué no abandono la idea
de seguir pendiente de tus fríos ojos, por qué no he pasado muchas páginas o
cerrado libros. Me gustaría saber por qué dejé de quererle y empecé a verle
como un amigo que no quiso corresponderme con su amistad.
Necesito... necesito saber por
qué dejé de escribir con entusiasmo, por qué un día me levanté y sentí que todo
era distinto, que ya nada estaba en su sitio y necesitaba un gran cambio. Preciso
entender por qué me he abandonado tanto a mí misma dedicándome esencialmente a
los demás.
Quiero crecer, y no solo eso,
quiero madurar y mirar atrás y ver que cada uno de los sueños que pedí con
dieciséis años se ha cumplido. No quiero verme a mí misma dentro de diez años y
darme cuenta de que en lo único en lo que no he perdido la esperanza es
encontrar el amor.
Por eso ahora voy a dedicarme
esencial y exclusivamente a mí y voy a dejar atrás un poco el corazón, para
guiarme de una vez por todas por la razón. Ahora comienzo un sendero impetuoso,
lleno de muchos más obstáculos de los que pueda imaginar. Algunos tendré que
saltarlos, otros treparlos o bordearlos pero… me sobrepondré a cada uno de
ellos y conseguiré mi meta: recuperarme a mí misma y avanzar hasta conquistar
mis sueños.
No hay comentarios:
Publicar un comentario