domingo, 22 de marzo de 2015

Qué poco me gusta

Qué poco me gusta este frío
que hiela hasta el alma, que hace estornudar
los te quieros como frases sin sentido.
Qué poco me gusta este invierno
que hiela las manos, que hace que
el calor de un abrazo, sea el frío de unos labios.
Qué poco me gusta en lo que nos hemos convertido.

La tecnología llegó a nosotros
y con ella los robots, humanoides
sin sentimientos que se desplazan
aletargados con sus nuevos iphones
de última generación.
Pero qué poco me gusta, que mientras te confieso
que nunca he mirado a nadie como te miro a los ojos,
tenga que ver en ellos el reflejo de una pantalla
a medio encender mi histeria.

Qué poco me gustan las sonrisas a medio hacer
al final del vagón, que sólo quedan en eso,
porque el ser humano, se ha vuelto estúpido
para entablar una conversación lejos del confort

que proporciona un teclado. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario